LO QUE DEBES SABER...
- El buen tiempo anima a muchos a empezar una dieta
adelgazante. Ahora es momento de empezar para
conseguirlo de forma progresiva y saludable.
- El sol nos aporta vitamina D por lo que conviene
aprovechar estos primeros rayos para empezar a
exponerse, eso sí, con moderación y las precauciones necesarias.
- Cada vez más compañías incluyen programas de
Medicina Preventiva y Nutrición para sus asegurados,
por considerar que son importantes para cuidar y
mantener la salud.
Cuidado con la operación biquini…
En cuanto a la alimentación, es conveniente
evitar
dietas rápidas y drásticas para el verano, es
mejor, planificar la pérdida de peso desde ahora y de
forma gradual. Se recomienda:
- Seguir una dieta equilibrada con
abundancia de frutas, verduras y pescados.
- Aprovechar que se trata de la estación del año en
que hay más abundancia de alimentos frescos
repletos de vitaminas, fibra y minerales. Es un
buen momento para empezar a comer sano y “abusar” de
fruta, verdura y cereales integrales en nuestra
alimentación, relegando los platos copiosos y con
exceso de grasa más frecuentes en invierno y los
alimentos ricos en azúcar refinado.
- Las vitaminas más frecuentes en los alimentos
de temporada son vitamina A, betacarotenos
(antioxidantes, protectores de sol) y vitamina C.
Las fresas son una excelente opción
en los postres ya que es una fruta muy rica en
vitaminas y con bajo contenido calórico (de las que
menos cantidad de azúcar contiene).
Empezar a disfrutar del sol…
La primavera es una gran oportunidad para pasar más
tiempo al
aire libre, recibiendo moderadamente el
sol que nos aporte vitamina D. Algunos consejos para
empezar a tomar el sol y que se deben extremar luego en
la época estival incluyen:
- Reducir la exposición al sol
entre las 11.00 AM y las 15.00 PM, es decir, cuando
su luz es más fuerte.
- Comenzar ya a aplicar un filtro solar en
crema o gel antes de cada exposición al sol. El sol
de primavera ya puede provocar daños en la piel.
- Se recomienda un filtro solar con un factor de
protección (SPF) mínimo de 30. El SFP que cada
paciente debe emplear depende de su tipo de piel y
de la intensidad de la radiación solar.
- Estas medidas deben tomarse también en los días
nublados, ya que gran parte de la radiación solar
sigue siendo dañina en esos días.
- La sensibilidad aumentada al sol
(fotosensibilidad) puede ser un efecto
secundario de algunos medicamentos. Debemos
consultar al médico o al farmacéutico si podemos
exponernos al sol al tomar medicamentos.
- Deberíamos evitar los salones de bronceado.
La luz ultravioleta de las cabinas de broncear puede
causar quemaduras, envejecimiento prematuro, y
causar cáncer de piel.
- Todas estas medidas son especialmente importante en
las personas de piel blanca, cabello rubio o
pelirrojo, ojos claros, que se queman con facilidad
con el sol, y que presentan muchas pecas. Son las
personas con mayor riesgo de cáncer de piel.