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miércoles, 22 de octubre de 2025

¿QUE ES EL ESOFAGO DE BARRET?

 



Se trata de un trastorno que se produce por sufrir ardor de estómago durante mucho años seguidos. Suele ir asociado a otras complicaciones, pero existen diversos tratamientos, el más eficaz es el inhibidor de la bomba de protones.





El esófago de Barrett es una complicación derivada del reflujo gastro-esofágico crónico y mantenido. Por tanto, es una patología relevante en cuanto al riesgo que implica o su predisposición al cáncer de esófago.
Se trata de una alteración en el epitelio que reviste el esófago distal, en la zona de unión entre el esófago y el estómago. La acción continuada del ácido gástrico sobre este epitelio puede asociarse a una lesión precancerosa.



Síntomas del esófago de Barrett y diagnostico

La sintomatología más frecuentemente asociada a esta entidad es la pirosis (acidez), la regurgitación y la disfagia (dificultad al tragar).

Su diagnóstico se realiza mediante una endoscopia en la que se toman muestras histológicas (biopsias) para la confirmación diagnóstica. En caso de que se evidencie una alteración del epitelio del esófago deberán realizarse controles endoscópicos posteriores con toma de biopsias para su seguimiento evolutivo. La frecuencia de estas endoscopias dependerá del grado de displasia detectado.

Existen otras posibilidades de diagnóstico mediante nuevas técnicas mínimamente invasivas:, por ejemplo la Citoesponja. Consiste en la ingestión de una cápsula gelatinosa que se disuelve en el estómago formando una pequeña esponja. Cuando es extraída va recogiendo muestras del esófago que se analizan con un marcador inmunohistoquímico. Este marcador diferencia la extirpe de las diferentes células.






Tras el estudio puede concluirse la presencia de una displasia o afección precancerosa que se clasificará en función del grado de afectación del epitelio pudiendo encontrar una displasia de “alto grado”, de “bajo grado” o de grado “indefinido”.

  • La displasia de alto grado es la de peor pronóstico por su mayor riesgo de malignización.
  • La displasia de bajo grado indica que se observan algunas modificaciones anormales en la muestra obtenida.
  • La displasia de grado “Indefinido” cuando la muestra obtenida por biopsia no es concluyente. En caso de que la displasia esté confirmada el digestólogo realizará un seguimiento evolutivo.

La confirmación diagnóstica de esófago de Barrett sin displasia también sería una indicación para un seguimiento evolutivo, pero permitiría dilatar las visitas en el tiempo, así como la realización de pruebas de seguimiento (endoscopia superior con biopsia).


¿Quién suele padecer el esófago de Barrett?



El esófago de Barrett suele padecerlo un perfil de personas que incluyen hombres de raza blanca mayores de 50 años que presentan enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) crónica. Otros factores de riesgo importantes son el sobrepeso, el tabaquismo y tener antecedentes familiares de esta enfermedad o cáncer de esófago.

Factores demográficos
  • Sexo: Los hombres tienen mayor riesgo que las mujeres
  • Raza: Las personas de raza blanca presentan un mayor riesgo en comparación con otros grupos raciales. 
  • Edad: Es más común en adultos mayores de 50 años

  • Factores de estilo de vida y salud
    • Reflujo gastroesofágico (ERGE) crónico: La causa principal es la exposición prolongada del esófago al ácido estomacal
    • Sobrepeso: La grasa corporal alrededor del abdomen aumenta aún más el riesgo. 
    • Tabaquismo: Fumar o haber fumado incrementa el riesgo
    • Antecedentes familiares: Tener familiares con esófago de Barrett o cáncer de esófago aumenta la probabilidad


  • Tratamiento

 El Esófago de Barrett debe abordarse terapéuticamente. Entre el abanico de posibilidades contamos con fármacos y/o cirugía. Inicialmente se opta por tratamiento médico sintomático junto a una dieta específica para controlar los síntomas.

El tratamiento médico estrella consiste en el empleo de una familia farmacológica llamada “Inhibidores de la bomba de protones” (IBP) muy eficaces en la mejoría sintomática del reflujo. La duración del tratamiento dependerá de la severidad de los síntomas y de los hallazgos de la biopsia.

Otros tratamientos posibles son:

La ablación endoscópica térmica emplea energía fotodiná­mica y radiofrecuen­cia que actúa sobre la capa superficial del esófago donde se localiza el tejido anormal del Esófago de Barrett. Existe otra alternativa de ablación con crioterapia empleando dióxido carbónico o nitrógeno líquido.

  • El tratamiento endoscópico con resección erradicadora se emplea cuando se visualizan lesiones displásicas en la endoscopia. Tras su realización suele hacerse una ablación complementaria.
  • La esofaguectomía (o exéresis esofágica) se ha considerado el tratamiento definitivo de la displasia de alto grado por eliminar la totalidad del tejido enfermo sin embargo es un tratamiento agresivo.





 





















































sábado, 18 de octubre de 2025

19 OCTUBRE- DÍA INTERNACIONAL DEL CÁNCER DE MAMA. PAPEL DE LA FISIOTERAPIA EN SU TRATAMIENTO.


El cáncer de mama es el tipo de tumor con mayor incidencia tanto en la población europea como española. Además se prevé un incremento de los casos del 2-3% anuales, por lo que se hace indispensable el diagnóstico y tratamiento médico precoz, así como un buen abordaje fisioterapéutico para paliar las consecuencias que se producen y favorecer la recuperación del paciente lo antes posible.

Hechos importantes sobre el cáncer de mama

El objetivo del tratamiento médico es eliminar las células cancerosas y reducir la probabilidad de que reaparezcan. Entre los tratamientos médicos más frecuentes están la cirugía, la radioterapia y la farmacología.

La cirugía sigue siendo uno de los pilares médicos para la eliminación del tumor, las opciones quirúrgicas dependerán del grado de extensión y de afectación  de la enfermedad, entre las más comunes están la extirpación de la mama (mastectomía) o la cirugía conservadora de la mama con disección de los ganglios linfáticos.

Una de las consecuencias más comunes tanto del cáncer de mama como de su tratamiento quirúrgico y radioterápico, es la aparición de linfedema que se define como la acumulación de líquidos que provocan la inflamación de los tejidos subcutáneos, dolor y sensación de opresión y pesadez de la parte del cuerpo afectado (en este caso el brazo y la mano).

La proporción del linfedema dependerá de:

  • El número de ganglios linfáticos extirpados/dañados.
  • El tratamiento con radioterapia: el riesgo de linfedema se puede incrementar hasta en un 48% entre las mujeres que se someten a radioterapia.
  • El índice de masa corporal: a mayor peso, más probabilidad de padecer el linfedema.
  • Factores de riesgo que favorezcan el aumento del linfedema: traumatismos, picaduras, cortes,…

Otras de las consecuencias nocivas de la cirugía, es la limitación del movimiento del hombro, ya que la cicatriz de la intervención, puede dificultar el movimiento y la realización de actividades diarias.

 

¿Cómo puede ayudar la fisioterapia a las pacientes de cáncer de mama?

La fisioterapia puede ayudar a recuperar la calidad de vida cuanto antes, tras haber sido sometido a una operación de cáncer de mama.

El linfedema es una enfermedad crónica que requiere una vigilancia casi constante para evitar el progreso del mismo, ya que puede causar deterioro de la capacidad física funcional en la parte superior del cuerpo.

Una de los tratamientos más aceptados desde la fisioterapia, para tratar con pacientes de cáncer de mama es la "terapia descongestiva compleja." Este enfoque integral incluye el drenaje linfático manual, la compresión de la extremidad inflamada, ejercicio físico, rehabilitación del hombro, ejercicios respiratorios profundos para promover el flujo venoso y linfático, cuidado de la piel, y la educación del paciente en el autocuidado.

La terapia descongestiva compleja se produce en dos fases:

La primera fase es intensiva y el terapeuta tiene como objetivo reducir la inflamación y los síntomas. Esta fase puede durar de una a cuatro semanas y puede durar de 2  hasta 20 sesiones de tratamiento. Una vez llegado a una meseta de la mejora, comenzará la segunda fase de autocuidado y reducción del riesgo.

 

Entre los tratamientos aplicados de esta terapia destacan:

Drenaje linfático manual

Es un tipo de terapia manual, donde se persigue favorecer la reabsorción del edema, activando el sistema linfático. Suele realizarse varias veces por semana, en función del grado de afectación y según las pautas que le dé su terapeuta. La duración suele ser de aproximadamente una hora.

Compresión de la extremidad inflamada

Inicialmente, se realizarán vendajes compresivos para perseguir la reabsorción del edema. Posteriormente, se puede incluir el uso de una prenda de compresión hecha a medida. El uso de la misma,  será durante el día (deben ser reemplazadas por lo menos cada seis meses y ser lavadas de acuerdo a las instrucciones especiales).

Ejercicio físico

Tradicionalmente, después de la cirugía de cáncer de mama, se recomendaba a las pacientes no realizar actividad física extenuante y los ejercicios en el lado afecto, para evitar el aumento del linfedema. Sin embargo, los estudios científicos, han demostrado que el ejercicio físico, ni causa ni empeoran el linfedema, sino que lo mejora, reduciendo su volumen además de mejorar la calidad de vida de la paciente y su condición física; por lo que están completamente indicados en este caso. El ejercicio físico, se deberá de hacer con un plan individualizado, en función de las características de la paciente y sin objetivos competitivos.

Rehabilitación de hombro

Se debe realizar un tratamiento personalizado con el fin de recuperar la funcionalidad del hombro, recuperando el rango de movimiento, aumentando la fuerza muscular y disminuyendo la inflamación. Además, se deberá de tratar la cicatriz de la intervención, para facilitar la máxima funcionalidad y que no restrinja el movimiento ni cause dolor.  

Educación del paciente en el autocuidado

Es importante que la paciente evite golpes o lesiones para reducir el riesgo de infección así como prendas que corten la circulación. Además se deberá de evitar hacer ejercicio físico evitando temperaturas extremas. Es conveniente que se utilicen guantes para  realizar las actividades que pueden causar irritación de la piel o lesiones (por ejemplo, lavar los platos, la jardinería, el trabajo con herramientas).




viernes, 10 de octubre de 2025

FISIOTERAPIA EN SALUD MENTAL

 


Hoy celebramos el Día de la Salud Mental y por este motivo queremos hablar de un tema muy desconocido como es la labor del fisioterapeuta en salud mental. La Fisioterapia en Salud Mental es un área que promueve la prevención, tratamiento y rehabilitación, tanto individual como grupal, de personas que padecen trastornos psiquiátricos o problemas psicosomáticos, entre otros. 

El objetivo de la Fisioterapia en Salud Mental es optimizar y potenciar al individuo mediante la promoción del movimiento funcional, la conciencia corporal, y la promoción de la actividad física y el ejercicio, incluyendo los aspectos físicos, psicológicos, y sociales de la persona.
Esta especialidad de la Fisioterapia está basada en la mejor evidencia científica disponible y centrada en la persona, permitiendo abordar tanto a niños y adolescentes como a adultos y personas mayores con problemas de salud mental leves, moderados o graves, tanto agudos como crónicos.
La Fisioterapia en Salud Mental tiene una gran presencia en muchas naciones en Europa, como Bélgica, Reino Unido, los Países Escandinavos o los Países Bajos, donde lleva ejerciéndose y formando parte del currículum universitario desde hace más de cuarenta años. El interés por la Fisioterapia en Salud Mental ha aumentado en los últimos tiempos, y actualmente cuenta con una sección dentro de la Organización Mundial de Fisioterapeutas (World Physiotherapy), con 29 países miembros.
El interés por esta área de conocimiento también se ha incrementado en los últimos años en España, tras la creación del subgrupo de Fisioterapia en Salud Mental de la Asociación Española de Fisioterapeutas (AEF) en 2011. Sin embargo, aún sigue siendo desconocida para la mayoría de la población general y las instituciones hospitalarias y universitarias. La asignatura de Fisioterapia en Salud Mental sigue estando ausente en la mayoría de programas educativos en los grados de Fisioterapia y existen pocas opciones de formación de posgrado.
La Fisioterapia en Salud Mental ha mostrado evidencia científica en una gran variedad de alteraciones mentales tales como en los trastornos de la alimentación, depresión, esquizofrenia, alteraciones de la personalidad, demencias, conductas adictivas y ansiedad.
En muchos casos, los trastornos mentales presentan también síntomas físicos, lo que demuestra la estrecha relación entre el cuerpo y la mente. 
  • En una persona con anorexia nerviosa se puede observar atrofia muscular, osteoporosis, fatiga crónica, alteraciones de la postura, contracturas, dolor muscular, etc. 
  • Los trastornos depresivos suelen ir acompañados de disminución del tono muscular, un patrón de flexión generalizado con rotación interna de hombros, fatiga crónica, etc. 
  • Un porcentaje importante de los pacientes con esquizofrenia padecen síndrome metabólico, lo que disminuye casi 20 años su esperanza de vida.  
  • Las personas con estados de ansiedad pueden presentar tensión muscular, temblores, hormigueo, respiración superficial, aumento de la frecuencia respiratoria, etc. Además, casi el 70% de pacientes con trastorno de ansiedad muestran hiperlaxitud articular. 
Estos ejemplos muestran cómo un trastorno mental puede afectar de manera importante a la salud física de una persona. El abordaje de los síntomas físicos mediante la fisioterapia u otras especialidades puede mejorar o evitar un empeoramiento del estado mental del paciente. 
La intervención fisioterapéutica sobre los pacientes con trastornos mentales es muy variada, ya que los síntomas pueden diferir mucho de unos casos a otros. No obstante, los abordajes más frecuentemente utilizados en este campo son:  
  • Fisioterapia psicomotora 
  • Masoterapia (masajes terapéuticos) 
  • Estimulación multisensorial 
  • Actividad física adaptada  
  • Reeducación postural global: ejercicios para mejorar la relación entre cuerpo y mente a través del equilibrio, la respiración, la conciencia y la calidad del movimiento. Es muy efectiva en casos de depresión, ansiedad, esquizofrenia y trastornos de la conducta alimentaria. 
  • Equinoterapia.
Como hemos visto, es necesario abordar los síntomas físicos como parte del tratamiento global de los problemas de salud mental. De hecho, lo ideal es abordar al paciente desde un punto de vista multidisciplinar que incluya la intervención desde diversas especialidades como la psicología o la terapia ocupacional para tratar de manera conjunta los síntomas físicos y emocionales que coexisten en las patologías psíquicas.  

jueves, 9 de octubre de 2025

¿SOY ADICTO?

                                             
 

    Las adicciones son un trastorno mental crónico y recidivante, es decir, que alternan periodos de consumo más descontrolado con períodos de abstinencia en los que se abandona el consumo. Generan cambios en los circuitos del cerebro que provocan que la persona consuma de forma compulsiva a pesar de las consecuencias negativas físicas, psicológicas y sociales. 

   Las adicciones incluyen diferentes tipos de drogas como el tabaco, el alcohol, los tranquilizantes y los derivados del cannabis.

  También hay adicciones sin sustancias o adicciones comportamentales, son dependencias de un comportamiento o hábito que, aunque no involucre una sustancia psicoactiva, interfiere negativamente en la vida de una persona. Estas incluyen adicciones al juego, las compras compulsivas, la comida, el trabajo, el sexo y las nuevas tecnologías (internet, redes sociales, videojuegos).

  La detección precoz es especialmente importante en el tratamiento de las adicciones ya que permite reducir el daño producido por las mismas y mejorar la eficacia de las intervenciones terapéuticas.


¿Qué hacer en caso de sospecha de consumo o cualquier adicción?

Cuando el padre o la madre o cualquiera sospecha que su hijo o hija, un familiar o alguna persona próxima, consume drogas o está llevando a cabo conductas que podrían desembocar en algún otro tipo de adicción debe mostrarse comprensivo pero firme. Existen cosas que podrá hacer y otras que no:


¿Cuáles son los signos de alarma?




Ante la evidencia de consumo.

Cuando sea evidente, pida consejo a su médico de familia o acuda a un centro especializado. Debe saber que hay una serie de cosas que usted puede hacer y otras que no conviene que haga.







Si alguien tiene un problema de adicción, ¿Existe tratamiento?

  En la actualidad, todas las adicciones son consideradas como una enfermedad que requiere un tratamiento multidisciplinar y personalizado.
   Ante cualquier problema relacionado con las adicciones se aconseja acudir a un centro de tratamiento específico directamente, o bien solicitar ayuda de los profesionales de atención primaria que evaluarán cada caso y derivarán al centro que proceda.
   España posee una amplia red pública de centros ambulatorios de tratamiento, distribuidos por todas las Comunidades Autónomas, que a su vez se complementan con recursos socio sanitarios de inserción social y laboral.



Fuente: Plan Nacional sobre drogas del Ministerio de sanidad













jueves, 25 de septiembre de 2025

PIE CAVO : SÍNTOMAS, CAUSAS, DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO

 


El pie cavo es una deformidad con arco plantar elevado que genera dolor, inestabilidad y mala distribución del peso. Puede deberse a causas neuromusculares, lesiones o genética. Su tratamiento va desde plantillas hasta cirugía en casos graves.





El pie cavo es una anomalía del pie también conocida con pie cavus, en la que el arco plantar es mas alto de lo normal, lo que hace que cuando estamos de pie, se distribuya mal el peso sobrecargándose más el talón y la parte delantera del pie y dedos, en lugar de distribuirse de forma equilibrada en todo el pie.


¿Qué síntomas provoca?


El pie cavo suele provocar:

  • Dolor en la zona del arco y del talón (talalgia), así como en la parte plantar de los dedos (metatarsalgia).
  • Sensibilidad o calambres en los dedos.
  • Callosidades plantares.
  • Inestabilidad en los tobillos provocando torpeza y cambios en la forma de caminar.
  • Tensión muscular excesiva que conduzca a rigidez en las articulaciones del pie o a procesos inflamatorios de los tendones (tendinitis).
  • favorece la aparición de dedos en garra o en martillo.
  • dificultad para estar de pie largos periodos.

¿Qué causas tiene?


El pie cavo se produce por un desequilibrio entre los músculos que controlan el arco del pie que se contraen en exceso.

Hay diferentes causas que puede favorecerlo como ocurre en las personas que padecen traumatismos o lesiones repetitivas (esguinces, fracturas, torceduras, etc. en pies), lo que puede contribuir a desequilibrar las diferentes estructuras del pie.

Aquellos pacientes con enfermedades neuromusculares como espina bífida, parálisis cerebral, enfermedad de Charcot-Marie-Tooth y otras puede provocar espasticidad y favorecer la aparición de pie cavo.

También se ha indicado como causa cierta predisposición genética.



¿Cómo se diagnostica?

  • Evaluación clínica: un proveedor de atención médica realizará un examen físico para evaluar el arco, la marcha y la presencia de cualquier síntoma.

  • Evaluación neurológica: en muchos casos, se puede realizar una evaluación de la función nerviosa, como electromiografía (EMG) y estudios de conducción nerviosa, para identificar afecciones neurológicas subyacentes.

  • Estudios de imágenes: se pueden utilizar rayos X para evaluar la estructura del pie y la alineación de los huesos.



Tratamiento


Los tratamientos más comunes son:
  • Plantillas, que deben realizarse de forma personalizada para corregir los apoyos y hacerlos más uniformes.
  • Uso de zapatos en los que se puedan adaptar las plantillas y que sujeten bien sin oprimir y con buena amortiguación en la marcha.
  • Puede ser beneficiosa la fisioterapia dirigida para mejorar flexibilidad, evitar espasticidades y fortalecer los músculos. Debe incluir ejercicios de fortalecimiento, estiramientos, movilización articular, entrenamiento de la marcha y del equilibrio, reeducación neuromuscular y por último masaje que ayude a relajar los músculos tensos, aliviar el dolor y mejorar la circulación en la zona afectada.
  • En ocasiones puntuales puede ser necesario tomar analgésicos.
  • En casos severos y con gran deformidad puede ser necesaria la cirugía, siempre que se hayan agotado los tratamientos conservadores y en caso de deformidad severa o alteraciones de la movilidad o funcionalidad del pie que le impida caminar.