Subscribe:

lunes, 25 de abril de 2022

CÁNCER DE CÉRVIX: DETECCIÓN Y PREVENCIÓN

 

El cáncer de cuello uterino se origina cuando las células sanas de la superficie del cuello uterino cambian y proliferan sin control, dando lugar a un tumor, el cual puede ser canceroso o benigno.

Existen dos tipos principales de cáncer de cuello uterino, estos son:

  •        Carcinoma de células escamosas, constituyendo aproximadamente del 80 al 90% de los tipos de cáncer de cuello uterino. Este tipo de cáncer comienza en las células de la superficie exterior que recubre el cuello uterino.
  •         Adenocarcinoma, constituye alrededor del 10-20% de todos los tipos de cáncer del cuello uterino. Este comienza en las células glandulares que recubren la parte baja del canal del parto.

Los siguientes factores de riesgo que, entre otros, pueden elevar la probabilidad en una mujer de desarrollar cáncer de cuello uterino son:

  • Infección por el virus del papiloma humano (HPV), siendo el factor de riesgo más importante del cáncer de cuello uterino.
  • Deficiencia del sistema inmunitario.
  • Presencia de herpes genital.
  • Tabaquismo.
  • Edad (el riesgo aumenta entre el final de la adolescencia y mediados de los 30 años de edad. Las mujeres mayores de 40 años de edad aún siguen en riesgo).
  • Factores socioeconómicos.
  • Haberse expuesto al medicamento Dietilestilbestrol (DES) antes de nacer.
Las investigaciones continúan estudiando qué factores provocan este tipo de cáncer y qué pueden hacer las mujeres para reducir su riesgo personal.

    PREVENCIÓN

Frecuentemente, el cáncer de cérvix puede prevenirse con pruebas de detección temprana regulares para detectar cualquier precáncer y tratarlo, así como con la vacuna contra el VPH.

La vacuna contra el VPH protege contra los tipos de VPH que causan el cáncer de cuello uterino, vagina y vulva con mayor frecuencia (hay más de 14 tipos de VPH, siendo el VPH16 y el VPH18 los que causan la mayoría de los cánceres). Esta se recomienda para los preadolescentes de 11 a 12 años de edad, abarcando hasta los 26 años si aún no se han vacunado.

Si se comienza la vacunación antes de los 15 años, se recomiendan dos dosis con un intervalo de entre 6 y 12 meses entre ellas. Si por el contrario se empieza después de cumplir los 15 años, se les pone la vacuna en una serie de tres inyecciones.

La vacunación contra el VPH previene nuevas infecciones por este virus, pero no sirve para tratar las infecciones o enfermedades existentes.

PRUEBAS DE DETECCIÓN

Para ayudarnos a prevenir el cáncer de cuello uterino o a encontrarlo en etapas iniciales nos encontramos con dos pruebas de detección:

-        La prueba del VPH, busca el virus del papiloma humano, que puede causar este tipo de cambios celulares.

-        La prueba de Papanicolau (o citología vaginal), busca precánceres (cambios en las células del cuello uterino que podrían convertirse en cáncer si no se tratan de forma adecuada). Es necesario seguir estas indicaciones antes de realizarse la prueba: no hacerse lavados vaginales, no usar tampones, no aplicar medicamentos o cremas en la vagina y no mantener relaciones sexuales.



Otras medidas como no fumar, utilizar preservativo durante las relaciones sexuales o limitar el número de parejas sexuales reducen el riesgo de contraer cáncer de cuello uterino.

Se recomienda hacerse pruebas de detección con regularidad, incluso si se recibió la vacuna contra el VPH.

SÍNTOMAS Y SIGNOS

La mayoría de las mujeres no tienen signos ni síntomas de precáncer, estos aparecen en mujeres con cáncer de cuello uterino en estadios temprano y avanzado. Algunos de estos signos y síntomas pueden ser:

  •        Manchas de sangre o sangrado leve entre o después de la menstruación.
  •         Sangrado menstrual más prolongado y abundante de lo habitual.
  •         Sangrado después de relaciones sexuales, el lavado genital o examen pélvico.
  •         Mayor secreción vaginal.
  •         Dolor durante las relaciones sexuales.
  •         Sangrado después de la menopausia.
  •         Dolor de espalda y/o pélvico persistente y sin razón aparente.

Cuando aparezcan estos síntomas es importante hablar sobre ellos con el médico aun cuando se asemejen a los síntomas de otras enfermedades menos graves.

       TRATAMIENTO

Si el resultado de las pruebas indica la presencia de células anormales que pueden convertirse en cáncer, su médico le informará si necesita un tratamiento. En la atención del cáncer, a menudo trabajan juntos distintos tipos de médicos para crear un plan de tratamiento integral de la paciente que combine distintos tipos de tratamiento. El tratamiento del cáncer de cuello uterino depende de varios factores, entre ellos, el tipo y estadio del cáncer, los efectos secundarios posibles, así como las preferencias de la mujer y el estado de salud general. En función de estos factores, hay cinco tipos de tratamiento estándar que pueden utilizarse: cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia dirigida e inmunoterapia.


0 comentarios:

Publicar un comentario